Jorge y Ramón Vargas González eran hermanos. Ambos nacieron en México, Jorge en 1899 y Ramón en 1905. Jorge era empleado de la Compañía Hidroeléctrica y Ramón (que era pelirrojo) era estudiante de Medicina. Pertenecían a una familia numerosa de profunda fe cristiana. Durante la persecución religiosa en México (1926), suscitada por el presidente Plutarco Elías Calles, la familia Vargas González dio en su casa protección a un sacerdote por un tiempo, y luego a "Anacleto González Flores" (Laico católico dirigente moral de la Revolución Cristera).
El día 1 de abril de 1927, por la madrugada, varios oficiales ingresaron en la casa de los Vargas González, el padre de la familia no se encontraba en la casa. Toda la familia, junto a Anacleto, fue apresada y llevada a la Comandancia de la Policía del Palacio del Ayuntamiento. Las mujeres quedaron allí, y a los varones los llevaron al Cuartel Colorado. Allí mismo fusilaron a Jorge Vargas González, a Ramón Vargas González, a Anacleto González Flores, y a otro joven llamado Luis Padilla. Las mujeres fueron liberadas por la tarde. Para esa hora, los cuatro jóvenes ya habían sido fusilados.
Estos mártires mexicanos fueron beatificados el 20 de noviembre de 2005.
Los restos de los beatos Jorge y Ramón Vargas González descansan en la parroquia San Francisco de Asís en Ahualulco de Mercado, Jalisco, México.
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